Evasión...

Evasión...
¿Será por siempre el Rock un marginal en Chile?

domingo, 5 de octubre de 2008

A veinte años, ¿objetivo logrado?

No tengo muchos recuerdos, ya que era muy niño. Pero sí recuerdo que mi querido abuelo Tito me regalaba banderas, brazaletes y cintillos que decían "No", tan vistosos que a donde iba los llevaba, desatando la preocupación de mi mamá ante lo delicado que se había vuelto el ambiente en mi barrio que entonces era apenas una población de la comuna de La Granja. No entendía por qué en los muros de las casas había tantos escritos en pintura aerosol que rezaban consignas como "No más hambre" y esas cosas...Pero sí recuerdo que el debate entre mis parientes más cercanos contra otros (felizmente más lejanos) más bien momios era encendido, y mis viejos me hacían ver con peras y manzanas que debía ganar el No, sólo para que lo supiera, no para que hiciera algo al respecto, después de todo, ¿qué iba a hacer yo, un mocoso que apenas pasaba los cuatro años?
Bueno, recuerdo además a mi banda de rock favorita (Los Prisioneros), que entonces sufría la censura debido a su participación activa en la campaña por el No, además de la covertura periodística que recibía el regreso del exilio de otra de mis bandas más queridas, Illapu, que muy cerca de mi casa ofrecieron uno de los conciertos más emblemáticos de toda la historia de la música chilena, en el Parque La Bandera, el 24 de Septiembre, a sólo días de la fecha clave.
La canción "La Alegría Ya Viene" fue el himno de esa época, tan llena de esperanzas e ilusiones. La franja televisiva era realmente hermosa y contagiosa. Trajeron a un especialista francés para que colaborara en la campaña, y dispusieron de unos cuántos sapos de mesa para evitar la adulteración de votos, amén de pequeñas oficinas secretas del comando de la Concertación (la de entonces, conformada por dieciocho partidos, de los cuáles más de la mitad ya no existen) ubicadas en direcciones estratégicas donde se contaban cuántos electores efectivamente votaron aquella jornada del 5 de Octubre.
El resultado fue estrecho, aunque no debemos desconocer lo difícil que se le hizo votar a miles de chilenos. Mi abuelo y sus hermanos (todos ellos ex presos políticos) eran quizá los más contentos. De todos modos, el dictador ya no pudo salirse con la suya otra vez. ¿Hay cambios? Claro que sí, pero la exclusión se ha mantenido en términos de participación activa de personas que aportaron mucho para que los actuales líderes puedan ejercer hoy el mando de este país. Claro que ya existen varios tipos salidos del conglomerado del Pacto Juntos Podemos Más por los que no tengo ninguna intención de votar para estas elecciones municipales, ya que no faltan los huevones que requieren de un jefecito o un ícono político o religioso para pensar y actuar, y sobre todo, con intenciones más favorables hacia una coloración política antes que las necesidades de una comunidad.
Aclaro que no escribo esto para manifestar simpatías por alguna ideología en particular. Todas son tan parecidas y contradictorias al fin y al cabo...No sé si la palabra "apartidista" me define bien tampoco. Soy más bien un desencantado.
Y bueno, para los que efectivamente les alegró dicho triunfo acontecido hace ya veinte años, regalo este enlace http://www.youtube.com/watch?v=qMRJHV5NufM
No permitamos que ningún intelectualoide, sea cuál sea su coloración política, nos quite nuestra libertad, a veces no es necesario usar armas (como lo hizo la Junta Militar aquel Martes 11 de Septiembre) para que sutilmente nos conviertan en marionetas y esclavos. No lo olviden.
Suyo Afectísimo,
Isaac Taladriz